Noviembre 2020. En el mar miles de personas viven un DRAMA. Su grito se escucha día tras día…como el grito desgarrador e imborrable de una madre que ha perdido a su bebé y el de tantas personas que a diario pierden su vida intentando alcanzar un futuro mejor. Impotencia. Dolor. Sin sentido. ¿Hasta cuándo?
¿Seremos
capaces de conocer sus causas y atajarlas? ¿De repensar una nueva y diferente
política migratoria?
Podemos
sentir rechazo, indiferencia… o comprometernos...
Realidades eclesiales, sociales, asociaciones, ONGs que no desean mirar hacia otro lado despertando en nosotr@s la compasión, la esperanza, la denuncia…Luchando por un mundo en donde la migración sea un derecho real y respetado.
Tanta
gente que son rendijas de esperanza
en medio de estas situaciones…
Los
migrantes son personas, no mercancía. Las personas migrantes reflejan las
carencias de los regímenes políticos, económicos y sociales. Diversas rutas de
un éxodo provocadas por la pobreza, el racismo, la guerra, las mafias…Una
violencia estructural, una desigualdad económica brutal….
Nuestra
mirada, nuestra energía, nuestra vida… desde donde estemos… clama por una
realidad en la que se acabe con estos dramas…
No hay comentarios.:
Publicar un comentario